Hoy voy a recordar y poneros una de las primeras películas en las que sale Drew Barrymore, una adaptación de un libro de Stephen King, bastante buena a mi juicio.
Os hablo de... Ojos de fuego.
La protagonista del libro, Charlie McGee (Drew Barrymore), es una niña de siete años que es piroquinética, con solo desearlo es capaz de hacer que cualquier cosa estalle en llamas. Cuando sus padres se conocieron jamás imaginaron las terribles consecuencias que iban a desencadenar sus actos. Un experimento con fuertes drogas alucinógenas, llamado el Lote Seis, al que ambos se someten voluntariamente les otorga cualidades como la telepatía o la telequinesia, pero es el fruto de su unión, una niña de apenas cuatro años quien tiene los poderes más terroríficos e inesperados.
Demasiado peligroso para olvidarlo, eso por lo menos deben de pensar los agentes de la Tienda, una organización gubernamental secreta que se encarga de vigilar a las personas que recibieron el Lote Seis, pues a lo largo de toda la novela persiguien a la pobre niña y a su padre quienes no tienen más remedio que aprender a controlar y utilizar los poderes de ella si quieren salvarse de una muerte segura o de toda una vida encerrada como si fuera un ratón de laboratorio.
La magnífica trama, un reparto plagado de estrellas como George C. Scott, Martin Sheen, Lousie Fletcher, Art Carney, David Keith, Heather Locklear y los impresionantes efectos, creados por los mismos especialistas que trabajaron en la guerra de las galaxias, E.T., y en busca del arca perdida, hacen de esta película un deslumbrador thriller pirotécnico.
Aquí os dejo el tráiler de esta entretenida película, en inglés.
Un abrazo del Capitán Hispania.
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