Día 6.

Hola a todos.

Animado por conocer la historia, e intrigado por lo que las películas rodadas con medios de última generación pueden ofrecer a los espectadores, fui este fin de semana muy bien acompañado a ver una película que ciertamente prometía mucho, pero se quedó en más bien poco.

Me refiero a... El retrato de Dorian Grey.


Película, eso sí, muy bien ambientada en el Londres de comienzos del siglo XX, cuando un joven que lleva toda su adolescencia en el campo, es trasladado a la capital, donde siente admiración por todo lo que sucede allí.

De familia rica, Dorian hereda algo más que prestigio. Belleza, juventud, y un ansia de poder, le llevan a frecuentar en demasía la compañía de Lord Henry Bottom, el cual sumerje a Dorian Grey en una espiral de sexo, placer y desenfreno del cual no parece estar dispuesto a prescindir.

Un amigo de la familia, Basil Hallward, es el encargado de pintarle un retrato donde aparece magnífico. Pero su egocentrismo, hace vender su alma al diablo, a costa de permanecer joven, de manera que los estragos del tiempo y de los placeres quedan reflejados en el cuadro. Al comienzo, parece no darse cuenta, pero conforme van apareciendo rasguños, arañazos y marcas en el cuadro, decide esconderlo bajo llave y tapado en el ático de su mansión.

Se dedica entonces a una espiral de sexo, tanto con mujeres como con hombres, en una crítica despiadada acerca de la sociedad británica de la Gran Bretaña de los siglos XVIII-XIX, apareciendo muy bien retratados los bajos fondos, así como los tiras y aflojas entre la aristocracia londinense, de forma que bien señoras mayores, bien adolescentes primerizas, son cautivadas sin ningún remordimiento de conciencia.

Las sospechas aparecen tanto en el pintor del cuadro, como en su "iniciador" a los placeres terrenales, por lo que ambos se deciden a encontrar el cuadro y ver qué sucede en él. El primero, muere apuñalado, es descuartizado y arrojado al Támesis.

El segundo, sospecha del tema, pero más aún cuando aparece en escena su hija, de la que Dorian queda prendado. Al no querer que su hija esté con tal monstruo, pide hacer una copia de la llave del ático, y allí encuentra el cuadro.

Aquí comienza la verdadera decepción de la película. Según la historia, Dorian Grey no podía ver el cuadro. Quienes esperen ver en esta película al Dorian Grey de "La Liga de los Hombres Extraordinarios", se van a llevar una decepción, y bastante grandilocuente. Aquí lo contempla una y otra vez, sin que pase nada. Una vez visto en lo que se ha convertido, clava una espada en el lienzo, transfiriendo así su alma al cuerpo, y dejando el cuadro como tal en su lugar.

Desde mi humilde punto de vista, es una película que engaña y mucho. Las dos largas horas que dura únicamente dan pie a un análisis de la aristocracia y los bajos fondos londinenses, en los que sólo el sexo y los engaños pueden ser moneda de cambio. He echado de menos en esta película algo más que sustancia, no un mero conteo de amores y engaños placer por el placer. Amén que la expresividad de los actores deja bastante que desear.

Lo único que realmente merece la pena de la película, es la recreación del Londres de principio de siglo, así como el vestuario y la fotografía. Pero vamos, para mi juicio, es una película sosa, insulsa y sin mucha posibilidad de recoger algo.

Así que, ya sabéis, antes de verla, os recomiendo que os vayáis con vuestra pareja a mirar bolsos, sandalias, zapatos, vestidos o lo que queráis, que os lo pasaréis mucho mejor, y aprovecharéis más el tiempo.

Un saludo del Capitán Hispania.